El contacto físico es muy importante desde el punto de vista psicológico, ya que tiene múltiples beneficios en emocionales, sociales y de comunicación. Beneficia nuestra salud emocional, nos transmite seguridad, y favorece el sentido de pertenencia. Además, puede ser una forma eficaz de comunicación no verbal, ya que puede transmitir y expresar emociones.
La importancia del contacto físico en los seres humanos ha evolucionado a lo largo de la historia. Desde el punto de vista biológico, este es necesario para la supervivencia y el desarrollo de los bebés. Los bebés necesitan contacto físico con las madres tanto como para obtener nutrientes y calor a través de la lactancia materna como también, para desarrollar su sistema nervioso, el apego hacia los padres y desarrollar las emociones.
A medida que los seres humanos han evolucionado, el contacto físico ha seguido siendo una forma importante de expresar y recibir afecto y conexión con los demás. En muchas culturas, el contacto físico es una forma común de saludar y mostrar afecto, y también puede ser una forma de transmitir emociones y mensajes no verbales. Aunque la forma en que se manifiesta el contacto físico puede variar según la cultura y las preferencias personales.
El contacto físico es beneficioso para la salud mental por muchas razones, entre ellas:
- Interviene en mecanismos fisiológicos disminuyendo la producción de cortisol (hormona relacionada con el estrés), aumentando la producción de oxitocina (hormona relacionada con el afecto), aumentando los niveles de serotonina (produciendo un efecto relajante), además de disminuir la presión sanguínea y el ritmo cardíaco, y fortalecer el sistema inmune.
- Ayuda a reducir la ansiedad y el estrés, además de por la regulación de hormonas y neurotransmisores que ayudan a producir ese efecto relajante, el contacto tiene un efecto relajante y tranquilizador.
- El contacto físico respetuosos y afectuoso puede tener un impacto positivo en la autoestima.
- Es una forma de conexión con los demás que favorece el sentido de pertenencia al grupo. Esto ayuda a disminuir la sensación de soledad y a fortalecer los lazos emocionales con otras personas, lo que contribuye a una mayor sensación de bienestar y satisfacción
- Es una forma de comunicación no verbal con la que podemos expresar multitud de emociones. Un gesto, una palmada, una caricia o un abrazo, pueden transmitir emociones, afecto, apoyo o consuelo sin necesidad de comunicación verbal. Estas formas de comunicación fortalecen los vínculos emocionales y ayudan a construir relaciones más sólidas y significativas.
En resumen, el contacto físico es esencial para la salud mental porque genera una sensación de pertenencia al grupo, regula mecanismo fisiológicos que reducen el estrés y la ansiedad, ayuda a desarrollar una autoestima y autoconcepto positivo, y mejora las habilidades de comunicación.
Es importante recordar que el contacto físico debe ser consensuado y respetuoso, y adaptarse a las preferencias y necesidades individuales de cada persona. Si una persona no disfruta del contacto físico o simplemente prefiere otras formas de expresar o recibir afecto, hay que respetarlo. Además, hay otras maneras de conectar con los demás como expresar sentimientos y emociones a través de gestos sin necesidad de contacto físico, compartir actividades juntos, o a través de una llamada, carta o mensaje. Lo importantes es respetar a los demás y elegir con que forma se encuentra uno más a gusto a la hora de expresar sus emociones o relacionarse con los demás.